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Alfabetización mediática: tu super poder en el mundo digital

Vivimos en una era en la que la información fluye como un río desbordado: corre por nuestras pantallas, inunda las redes sociales y se filtra en nuestras conversaciones cotidianas. Pero, ¿cómo sabemos qué creer y qué ignorar? ¿Cómo sabemos qué compartir, crear, comentar, y postear?

La respuesta está en la alfabetización mediática (AM), un grupo de habilidades que te permiten, por un lado, navegar con seguridad en este océano de información y por el otro, te ayudan a crear e interactuar con el contenido de manera crítica, ética y efectiva. 

Este tema no es solo para periodistas o expertos: es un superpoder que todas y todos necesitamos para entender, analizar y participar activamente en el mundo digital.

¿Qué es la alfabetización mediática?

La AM es la capacidad de acceder, analizar, evaluar y crear mensajes en diferentes medios. Desde las noticias en línea hasta los videos virales, estas competencias te enseñan a mirar más allá del titular llamativo y te da las herramientas para comprender quién está detrás de la información y con qué propósito. Pero no se queda solo en el análisis: también te empodera para convertirte en un creador o creadora de contenido responsable.

1. Acceso a los medios: abre las puertas de la información

Todo comienza con saber dónde buscar y cómo acceder a la información. Desde la televisión hasta las redes sociales, la AM nos enseña a movernos en estos espacios. No se trata solo de usar Google o navegar en redes, sino de entender qué plataformas ofrecen información confiable. Por ejemplo, ante una crisis sanitaria, saber distinguir entre las fuentes oficiales y los rumores en WhatsApp puede marcar la diferencia entre la verdad y la manipulación.

2. Análisis crítico: mira más allá de la superficie

No todo lo que se presenta como información lo es. Por ejemplo, muchas veces confundimos una noticia con una opinión y esto puede llevarnos a interpretaciones equivocadas. 

Una noticia se enfoca en hechos verificables: qué pasó, dónde, cómo y por qué, respaldándose en datos y fuentes. Una opinión, en cambio, expresa cómo alguien interpreta esos hechos desde su perspectiva personal o su manera de entender el mundo. Reconocer esta diferencia te ayuda a mirar la información con ojos más críticos y a tomar decisiones mejor fundamentadas.

La AM nos da herramientas para analizar críticamente los mensajes mediáticos. Nos invita a preguntarnos:

  • ¿Quién está detrás de este mensaje?
  • ¿Qué intención tiene?
  • ¿Está apelando a emociones para manipularme?

Cuando ves un titular alarmante, la alfabetización mediática te ayuda a no caer en pánico y buscar la información completa. Este análisis nos empodera para resistir la influencia de la desinformación.

3. Evaluación de la credibilidad: detecta fuentes confiables

No todas las fuentes de información son iguales. La AM nos ayuda a distinguir lo fiable de lo dudoso. Nos ayuda a reconocer cuándo una noticia proviene de un medio legítimo o si es un contenido impostor diseñado para engañar. Al buscar información sobre un tema, cruzar datos entre varias fuentes confiables se convierte en un acto de responsabilidad informativa.

4. Producción ética de contenido: sé un creador o creadora consciente

La AM también nos transforma en creadoras y creadores de contenido responsables. No solo consumimos información, también somos creadores y creadoras de contenido. La alfabetización mediática nos ayuda a hacerlo de forma responsable y ética, enseñándonos a reflexionar antes de compartir: ¿esto aporta valor? ¿Es cierto lo que estoy difundiendo? 

Al tomar estas decisiones, contribuimos a un ecosistema mediático más sano y confiable.

Ahora bien, ¿alguna vez te has preguntado si realmente estás cambiando de fuente de información cuando saltas de un portal de noticias a otro? A veces, aunque parezca que accedemos a distintas plataformas, todas pertenecen a la misma empresa. Y lo mismo ocurre cuando cambias de radio a televisión o a internet. 

Esto afecta la diversidad de perspectivas que consumimos. Reconocer estas dinámicas nos da el poder de cuestionar y diversificar nuestras fuentes para tener una visión más completa y equilibrada del mundo.

5. Comprensión de la influencia mediática: cómo los medios moldean la realidad

Los medios no solo informan, también moldean nuestras percepciones y creencias. La AM nos ayuda a ser conscientes de cómo influyen en nuestra forma de ver el mundo. 

Por ejemplo, una publicidad nos puede mostrar estándares de belleza poco realistas. La alfabetización mediática nos enseña a identificar estos mensajes y resistir su impacto negativo.

6. Reflexión ética: consume con responsabilidad

La AM fomenta un análisis crítico que nos lleva a reflexionar sobre lo que consumimos y compartimos. Nos hace conscientes de cómo la desinformación, los estereotipos y la manipulación pueden afectar a la sociedad. Promueve un consumo consciente y nos recuerda que nuestras decisiones en el entorno digital tienen consecuencias en el mundo real.

7. Participación activa: sé protagonista en lugar de espectador

Cuando tienes estas herramientas puedes participar activa y conscientemente en el ecosistema digital. No solo se trata de consumir contenido, sino de interactuar con él, cuestionar, comentar y contribuir de manera constructiva. En lugar de ser meros espectadores o consumidores pasivos, nos convertimos en ciudadanos y ciudadanas que influyen en el discurso público.

8. Adaptabilidad a nuevas tecnologías: siempre listos para evolucionar

Los medios y las tecnologías cambian constantemente, y la AM nos prepara para adaptarnos. Estar al tanto de nuevas plataformas, tendencias y riesgos es clave para mantenernos al tanto en un entorno digital en constante evolución.

Así como no es necesario ser un chef profesional para poder preparar un desayuno,  tampoco necesitas ser una experta o experto en tecnología para interactuar con los medios de manera crítica y responsable. De la misma forma que sigues una receta básica para cocinar, puedes aplicar principios sencillos, como verificar fuentes y reflexionar antes de compartir contenido, para adaptarte y aprovechar los medios y tecnologías de manera ética y consciente.

¿Por qué es tan importante la alfabetización mediática?

La alfabetización mediática no es solo un lujo, es una necesidad diaria. ¿Por qué? Porque:

  1. Promueve un consumo informado y consciente: Evita que caigas en la trampa de la manipulación y te ayuda a analizar críticamente los medios.
  2. Fortalece la democracia: Una ciudadanía informada es esencial para participar activamente en procesos políticos y sociales.
  3. Desarrolla habilidades de comunicación: Te enseña a expresarte de manera efectiva y ética.
  4. Protege contra la desinformación: Te ayuda a detectar noticias falsas y contenido manipulado, creando un entorno más saludable y veraz.
  5. Promueve un pensamiento crítico: Te impulsa a analizar la información más allá de lo superficial, cuestionar las intenciones detrás de los mensajes y reconocer posibles sesgos. Esto mejora tu capacidad para tomar decisiones informadas y te ayuda a construir opiniones fundamentadas para actuar de manera más consciente.

Tu papel en el mundo digital

La alfabetización mediática es más que una herramienta: es una forma de vida en la era digital. No solo te prepara para consumir información de manera crítica, sino para participar activamente en la construcción de una sociedad más informada, justa y ética. 

¿Estás lista y listo para asumir el desafío y convertirte en una persona informada y consciente? 

Porque la información es un superpoder, pero solo si sabes cómo usarla. 

ReferenciasUNESCO. (s.f.). Herramientas innovadoras de la UNESCO para la alfabetización mediática e informacional. UNESCO. Recuperado el 10 de diciembre del 2024 de https://www.unesco.org/es/articles/herramientas-innovadoras-de-la-unesco-para-la-alfabetizacion-mediatica-e-informacional